Jun
Proyecto: Oración
4 comentariosOrar la propia oración
Estoy aquí, solo ante ti, y estoy encantado porque tú me ves aquí. Pues aquí -eso creo- es donde quieres verme y donde me ves.
Estar aquí es la respuesta que me has pedido a algo que no he escuchado con claridad, pero he respondido…Me has llamado aquí para que una y otra vez nazca en el Espíritu como hijo tuyo. Una y otra vez nazca a la luz, a la fe, a la conciencia, a la gratitud, a la pobreza,a la presencia y a la alabanza.
Oración de Dios en ti
Asómbrate por las cosas que están ante ti, haciendo de esto el primer paso hacia un conocimiento más profundo (S. Clemente de Alejandría)
Párate delante de las situaciones tal y como se den en tu impulso hacia la vida, la pequeña esperanza que te hace volver a la vida cada día con fuerza…
Tu anhelo de amor, de afecto, de ternura…
Tu preocupación por hacer bien las cosas sencillas, lo que apenas verá nadie, y en ello tu búsqueda de la armonía…
Tu voluntad de ser amable, generoso, agradecido, comprensivo con los demás…
Tu alegría con y por lo bueno, lo bello, por la amistad, por la resolución de los problemas sean cuales sean y de quien sean…
Tu intento de no dejarte llevar por lo peor (más allá de que lo consigas o no)…
Tu dolor por el sufrimiento del mundo y tu rabia por la banalidad, la injusticia, lo mal hecho…
Todo ello, de una manera u otra, es obra del Espíritu en ti, un Espíritu que quiere hacerte gustar la vida misma de Dios prefigurada en la justicia, la belleza, el amor, el perdón, la armonía…
Por tanto…Aunque sientas que tu oración es muy pobre, Dios sigue en ti moviendo tu interior hacia sí, hacia el cumplimiento de tu vida y de la vida del mundo en Él...da gracias.