Jun
Los desconocidos de siempre
1 comentariosTodos estos días están dando la noticia del grupo de "Los Indignados 15-M de Madrid”, y que ya se había extendido por toda España, manifestando una serie de necesidades, con pancartas, gritos, canciones etc.
No, no voy a hablar sobre ello, sino de lo que nosotras y todos los que seguimos el blog de con Otros Ojos haríamos. Seremos los DESCONOCIDOS DE SIEMPRE, pero... es que en realidad, no tenemos mucho tiempo en la vida para estar perdiéndolo en otras cosas que no sea VIVIR con FUTURO. Primeramente, en nuestros años más jóvenes vamos deprisa, y parece que nos comemos el mundo, ahora ¿va a ser el mundo el que nos coma ?... No.
Quiero saborear lo que me queda, no tengo tiempo para reuniones interminables, que no solucionan nada, donde se discuten estatutos, procedimientos, directorios, pero ¿y la VIDA? Nuestra BUENA NOTICIA, es hablar con el Evangelio, viviéndolo a tope; no nos permite estar aún hablando con personas que aunque sean mayores cronológicamente, en humanidad no han crecido. El estar siempre con mediocridades donde solo importa el ego, y cuanto más se infle mejor; ¡basta ya la manipulación y lisonjas! , la envidia, los logros, los más capaces, lo majestuoso de un cargo, y un sinfín de verborreas, habladurías, murmuraciones y suposiciones.
Tomémonos en serio lo que nos queda de vida. Reírse, de los errores, tener sentido del humor, personas que no discutan por los títulos, o por los logros y triunfos conseguidos .Quiero rodearme de personas humanas, muy, muy humanas, que no huyan de sus responsabilidades, para andar y caminar en VERDAD, y personas en que lo esencial valga la pena. ‘Quiero rodearme de personas que tengan corazón, un corazón abierto, que toque a su vez el corazón de los demás, personas que ante la dureza de la vida, no se hagan las víctimas, sino que luchen y se dejen ayudar, para que esta dureza se transforme en suaves toques en el alma.
Sí, tengo prisa por todo ello, vivir con intensidad la madurez, y poder dar, darme .Dar y recibir sin desperdiciar nada de lo que me queda...Seguro que entonces llegaré a la PAZ, que ando buscando con toda satisfacción, y a la que cualquiera que piense así seguro que llegará , pero debemos acordarnos somos Los desconocidos de siempre